Si me sigues, ya sabrás que soy totalmente partidario de conocer perfectamente a la competencia.

Qué es lo que hace, cómo lo hace, quienes son sus clientes, etc.

Toda esta información es extremadamente valiosa para tu negocio.

Pero lo es, porque te marca el camino que NO has de seguir.

Ya que uno de tus objetivos es conseguir la diferenciación en tu negocio.

Te he comentado en muchas ocasiones las grandes ventajas de ser único de la forma que sea.

No voy a profundizar en ello, ya que quiero que veas otro aspecto que es realmente importante.

Con los últimos empresarios que he hablado, en nuestra conversación ha aparecido precisamente este tema, cómo está funcionando su competencia.

Muchos se fijan en que los negocios de la competencia funcionan mejor que los suyos.

Que están siempre llenos de clientes y que a pesar de sus esfuerzos están convencidos de que a su competencia les va mejor.

Y puede que sí sea así, no te lo puedo negar, pero déjame que te aclare dos aspectos importantes.

Lo primero, es que las comparaciones son siempre destructivas. Siempre.

Ya sea a nivel de negocio o a nivel personal.

Estas últimas mucho peores.

Has de saber que yo he trabajado con empresarios que tenían negocios con muchísimos clientes y buenas facturaciones.

Y sin embargo, empezar a trabajar con ellos, porque pese a todo ese trabajo, en muchos casos agotador hasta el extremo y de tener altas cifras de negocio, no les quedaba nada de beneficio.

Empezar a reestructurar el negocio, revisar costes y precios, perder clientes que no generaban ningún beneficio y pasar a trabajar menos con menos personas pero de forma mucho más rentable.

El resultado conseguido, ni color con el funcionamiento anterior ni con los beneficios generados.

Y esto lo he tenido que hacer en varios casos de negocios que aparentemente funcionaban muy bien.

Con esto quiero contarte que en muchas ocasiones, vemos lo de fuera, vemos negocios que tienen muchos clientes y sabemos a ciencia cierta que facturan muy bien.

Pero no tienes toda la información y probablemente no tengas forma de saberla.

Hay un dicho que dice: «El césped de mi vecino siempre está más verde»

Y es que en muchas ocasiones, nos fijamos en lo que muestra el vecino, los aparentes resultados que obtiene.

Nos parece hasta injusto comparados con los que obtenemos nosotros, el esfuerzo que hemos realizado y sacamos una conclusión final que siempre es equivocada.

Mi mejor recomendación es que te centres en tu negocio y en cómo mejorarlo.

Conocer la competencia, saber lo que hace y cómo… desde luego que sí.

Pero más enfocado a saber lo que NO hay que hacer y conseguir la diferenciación completa con ellos.

Luego trabajar en cómo ofrecer el mejor servicio posible al cliente con tu propuesta o concepto, olvidándote por completo de tu competencia.

Y centrarte en que tu cliente salga completamente satisfecho de tu negocio y con ganas de volver.

Y de esa forma, te aseguro que llegan los resultados.

¿Quieres darme tu versión de los hechos?

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